Els Pallaresos es un municipio español de la comarca catalana del Tarragonès. Se encuentra en una colina a 121 metros sobre el nivel del mar, situada en el margen izquierdo del río Francolí, a solo seis kilómetros de Tarragona. A finales del siglo XIII la villa se consideraba como un arrabal o una de las faldas de la misma ciudad. La superficie del municipio es de 5,53 kilómetros cuadrados y cuenta con una población que hoy ronda los cinco mil habitantes.

El pueblo engloba en su pequeño casco urbano un destacado conjunto artístico protegido como bien cultural de interés local y patrimonio arquitectónico de Cataluña. El arquitecto modernista Josep Maria Jujol i Gibert (1879-1949) dejó un amplio repertorio de su genialidad llena de vitalidad e inquietudes artísticas. Estrecho colaborador de Gaudí, fue un creador integral, precursor del arte abstracto, del surrealismo y también del reciclaje de elementos que integraba en cualquier campo de las artes plásticas. Este vocabulario distintivo, aplicado a su excepcional concepción de la arquitectura, creó un lenguaje propio que trascendió el Modernismo. El color azul de cobalto, el amarillo o el dorado forman parte de su ideario particular.

Son varias las edificaciones que muestran la impronta de su expresividad creativa. La destreza del artista ostenta en las antiguas escuelas, que luego fue el edificio del ayuntamiento y hoy es el Centro Jujol (1920); en la rehabilitación de la Casa Andreu (1920); en la reja de la Casa Solé (1927); en la reforma de la Casa Emília (1944) y en la Iglesia Parroquial de San Salvador (1945-47).

Pero sin duda la obra más valiosa de su legado es la restauración integral que materializa en la Casa Bofarull a partir de 1914. Imaginativa en las fachadas y los detalles, proyecta una bellísima galería posterior de estilo neomudéjar. En el interior, la original escalera, con angulaciones y barandilla innovadora, se alza con el torrejón que la cubre coronado por el ángel parabólico, luciendo las pinturas alegóricas de las estaciones del año que él traza con sus propias manos.

En el año 2021 se realizan las primeras Jornadas de divulgación histórica modernista del Camp de Tarragona. Con esta iniciativa el pueblo quiere valorizar su patrimonio y el extraordinario legado del arquitecto tarraconense. Els Pallaresos se convierte en un referente en la promoción de la obra jujoliana y en el impulso del manifiesto jujoliano que lidera la propia alcaldía. Sus dos hijos, Josep Maria y Teresa, vecinos del pueblo, custodian el valioso Archivo Jujol y es también aquí, en el mausoleo familiar, donde el artista descansa sepultado. Esta primera edición se centra en 1918, cuando Jujol corona la Casa Bofarull colocando el ángel de la guarda pararrayos, símbolo del pueblo, esculpido por el propio arquitecto.